Arch Enemy volvió con su octavo disco de estudio al cual han titulado Khaos Amott, un disco mucho más directo con influencias al death metal eso sí, manteniendo las influencias que tienen hacia las bandas reconocidas Judas Priest e Iron Maiden.
Han tenido que pasar cinco años, para que la banda volviera a sacar nuevo disco, aún así, sacaron alguna regrabación de proyectos antiguos.
La banda confirmó que con este disco, no tenían nada planeado, por lo que vivieron el momento sin planificar nada, de ahí el aire creativo que les caracteriza se ha hecho nuevamente notar en la banda y por supuesto, en su nuevo disco que salió hace unas semanas.
Además, hay que señalar que la banda, ha vuelto más a sus raíces, mucho más death que en anteriores discos, si todavía cabe más.
El concepto es sin duda una especie de rebeldía con los tiempos que corren, ya que como bien sabemos las cosas en todo el mundo, van de mal en peor, y quienes sino tienen un punto de apoyo para decir, en sus canciones lo que piensan, los artistas, sin duda alguna.
Arch Enemy es una de las bandas más estable dentro de su género, con una gran lista de seguidores fieles y estables, estando en su mejor momento, no descartan seguir renovándose.