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iMúsica Rock

NORTH MISSISSIPPI ALLSTARS en Madrid

North Mississippi Allstars banda
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North Mississippi Allstars celebran la publicación de su séptimo disco de estudio, «World Boogie Is Coming», con una gira europea que volverá a hacer parada en Madrid el próximo 10 de octubre (Sala Caracol) después del arrollador éxito de su anterior visita, y su paso el pasado año por el Azkena Rock Festival 2012, con un espectáculo lleno de guitarras electroacústicas, duelo de solos, largas jams, y mucho talento, que demuestra que están hechos para el directo.

A diferencia de giras anteriores, la banda regresa al formato de trío en directo, con la incorporación de Lightnin’ Malcolm al bajo, que dejará además boquiabiertos a los espectadores con su show de «one man band» para abrir el espectáculo.En sus conciertos, North Mississippi Allstars son frenéticamente dulces, intimistas, rabiosos, enérgicos y sensibles, abarcando y transmitiendo toda la gama de sentimientos del hondo poder musical del blues.

«World Boogie Is Coming» es el nuevo disco de los hermanos Luther Dickinson (guitarrista de John Hiatt, Willy Deville o The Black Crowes) y Cody Dickinson, conocidos como North Mississippi Allstars. Producido por ellos mismos, cuenta con la colaboración del mismísimo Robert Plant a la armónica, de los hermanos Duwayne y Garry Burnside (hijos de R. L. Burnside), Kenny Brown, Alvin Youngblood Hart, Sharde Thomas, Chris Chew, Sid y Steve Selvidge, todo ellos reunidos en los estudios Zebra Ranch Studios en Coldwater, propiedad de los vástagos de Jim Dickinson, legendario productor y pianista sureño, autor del sonido de piano en el «Wild Horses» original de The Rolling Stones y músico de acompañamiento de figuras como Willy DeVille, Ronnie Hawkins, Sam & Dave, Aretha Franklin, Screamin’ Jay Hawkins o Bob Dylan. De casta les viene a estos galgos sureños.

Tras su anterior trabajo, el magistral «Keys to the Kingdom» (2011), North Mississippi Allstars han querido dedicarle su nuevo disco a la ciudad de New Orleans y a su sonido y espíritu mágico. Como es habitual, el juego del gran abanico de guitarras y del «lowebow» de Luther Dickinson, ese instrumento de cuerda cuyo resonador está formado por una caja de puros, más el añadido de sus ásperas voces, nos recordarán el oscuro pasado del Delta y el Soul sureño.

Puro y duro blues de raza, caminando entre un amplio espectro de la tradición norteamericana. Una maravilla.